Se terminó Lost. ¡Por fin! Ya la estaban alargando demasiado. De todos modos, a pesar del "estirón" que le dieron, fue una gran serie de suspenso. Una de las mejores de los últimos diez años, sin duda.
Ahora que finalizó internet se está comenzando a poblar de análisis, comentarios y teorías sobre lo que les pasó a los losties. Hay a quienes les gustó el final y a quienes no. Hay defensores apasionados del enfoque narrativo subjetivo (sobre Jack) y detractores enardecidos que hubiesen preferido un final enfocado en el cierre de todas las líneas de suspenso argumentales de la trama. Aquí en TDM no nos meteremos en ese debate, sobran sitios en la red con esas disquisiciones. Lo que vamos a proponer es un ejercicio narrativo digno del más bizarro taller literario: Imaginemos qué actividad estarían desarrollando cinco años después algunos de los personajes de Lost.
Empezemos con este epílogo:
James "Sawyer" Ford:
Modelo de ropa interior
Kate Austin:
Es la "Madama" de una casa de citas
Hugo Reyes:
Conduce "Cuestión de Peso" para la TV norteamericana
Benjamin Linus:
Encontró su lugar en el mundo: cría roedores para las hamburguesas de Mc Donalds
John Locke:
Se dedicó a la actuación y es el nuevo Kojak.
Dr. Pierre Chang:
Produce películas de cine "B" con zombis que viajan en el tiempo.
Dres. Gerald y Karen DeGroot:
Sus cintas se convirtieron en el nuevo éxito del porno casero.
Cadaver podrido:
Consiguió trabajo de extra en una película de Jorge Romero.
Oso polar:
Ocupa un lugar de honor en la sala de trofeos de Sarah Palin.
Furgoneta de Dharma:
Hace de ómnibus escolar en Florencio Varela.
Estatua de pie con cuatro dedos:
La contrataron en la Acrópolis para impresionar a los turistas.
Humo Negro:
Fue inhalado por un fan de Bob Marley al confundirlo con un nuevo alucinógeno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario